La farsa del adeudo del IMSS.
Por: Félix Justiniano Ferráez.
Durante la
administración de Juan Ignacio García Zalvidea, el IMSS le realizó un auditoria
con fundamento en sus atribuciones que le da la propia Ley del IMSS y con el
art. 46 del código fiscal de la federación.
Dicha
auditoria se realizó al amparo de la orden de visita de fecha 5 de noviembre de
2002 y con la codificación siguiente: O.V.
2407/10C/AD/0013/.
Durante el
transcurso de esta revisión se determinaron diferencias en los salarios reales de
los empleados contra lo que se manifestaba al Seguro Social; de ahí surgieron
diferencias a partir del año 1998 hasta el 2002. Es decir se regularizaba algunas omisiones
del período de la profesora Magaly Achach y se ponía al día las cuotas obrero
patronales de los empleados de la administración del “Chacho”.
Aquí es importante aclarar que el Chacho recibe la
administración que le precedió con tres mil empleados municipales y a los nueve
meses de su gestión ya alcanzaba la cifra de 5,800 o sea casi el doble en menos
de un año, de ahí que la mayor parte del adeudo surgido le correspondía a su
propia administración.
Esta
auditoria que concluye con un acta final 19 meses después el 12 de mayo de
2004; da origen a un adeudo de: $ 20,244,676.25 Que por su cuantía debe ser
fraccionado para poder cubrirlo. Esta situación da origen a dos convenios de
facilidades de pago como sigue:
238(24)04 por $ 11,517,347.49 y
239(24)04 por $ 8,727,328.76
Dichos
convenios son fraccionados a 11 parcialidades mensuales, que inician justamente
en mayo de 2004 y concluye en marzo de 2005 que es el término del período de la
administración de Juan Ignacio García incluyendo el interinato a partir de
Octubre de 2004 de Carlos Canabal Ruiz.
Considerando
las características, formalidades y
facultades del Seguro Social, el convenio es garantizado y pagado con cargo a
las participaciones federales del Ayuntamiento, de esa manera se aseguraba su
cumplimiento aún cuando el clausulado facultaba al IMSS a rescindir dichos
documentos al menor incumplimiento, pero lo verdaderamente trascendente es que
en el convenio 238; la cláusula 9a y la 10a inciso “C”
obligaba al ayuntamiento a pagar puntualmente las parcialidades y además PAGAR
SUS BIMESTRES SUBSECUENTES EN TIEMPO Y FORMA.
Es decir
para que tuviera vigencia y legalidad este convenio el Chacho y su carnal
Canabal tuvieron necesariamente que pagar oportunamente y en su justo importe
los bimestres no incluidos en el convenio y hasta que terminase su período
constitucional, misma situación que se observa en el convenio No 239 pero en
este caso en las cláusulas sexta y séptima inciso “D“.
En concreto,
Juan Ignacio García Zalvidea le pagó al IMSS todo adeudo con relación a cuotas
obro patronales durante su período, de
ello dan cuenta estos documentos.
Por lo tanto
Francisco Alor tiene la obligación de precisar cual es el origen del actual
adeudo, que recientemente con bombo y platillo anuncia en inserciones pagadas
en todos los diarios como un triunfo de su Administración, habida cuenta de que
en realidad no lo paga el Ayuntamiento (inserciones y el descomunal adeudo)
sino los ciudadanos a través de sus contribuciones; pero además y ojo a cada
trabajador se le descuenta puntualmente su parte de estas cuotas, por lo tanto
es injustificable e ilegal, que no se hayan enterado al IMSS.
Ahora bien
suponiendo sin conceder que haya sido el chacho el responsable, ¿Por qué tardó
el Oficial Mayor Alejandro Musi mas de 2 años en notarlo, si es que lo notó?
Tanto la Directora
de Recursos Humanos Rosalba Tovar Rodríguez
y el Asesor del Oficial Néstor Octavio Sánchez Vanda, trabajaron en
puestos similares desde la época de García Zalvidea ¿por qué no informaron de
estas irregularidades al Señor Musi Letayf ?
¿A qué se ha dedicado estos dos años el Contralor
Municipal Alonso Alonzo Rodríguez que no ha sido capaz de darse cuenta de esta
gigantesca ilegalidad? Si se considera
que la reclusión del Chacho se debe a una auditoria del Contador Mayor de
Hacienda de aquellos días, Joaquín Oliva
Alamilla.
¿Entonces como se justifica la existencia de
la contraloría municipal con más de 50 trabajadores que no han hecho más que
cobrar un salario no devengado mientras Carlos Canabal se pasea impunemente?
¿Cuándo
sabremos quienes son los responsables de semejante atraco y cuando los veremos
denunciados ante la PGR ,
considerando que es un delito federal la evasión fiscal al IMSS? ¿Qué piensan hacer al respecto los regidores
del ayuntamiento de Benito Juárez?
¿Qué decisión tomarán los diputados para
evitar este atraco al pueblo de Cancún? ¿Por qué Alor insiste en pagar con
tierras, lo que ya obtuvo en facilidades de pago con dinero? ¿Sabe el
Licenciado Alor que los predios propiedad del Ayuntamiento deben ser enajenados
mediante SUBASTA PÚBLICA?
Existen un
par de preguntas ciudadanas para el presidente municipal que protestó guardar y
hacer guardar la
Constitución Estatal y las leyes que de ella emanan, ¿Por qué
si los trabajadores ya pagaron sus
cuotas al IMSS al serles descontadas puntualmente, se tiene que volver a pagar
esa deuda con unos terrenos que nos pertenecen a todos, en vez de
responsabilizar a los verdaderos culpables y fincarles responsabilidades
legales y penales y resarcir al IMSS y al Ayuntamiento de este atraco?
¿Cuánto
costó y cuál fue el resultado de la
auditoria que para esos fines contrató el ayuntamiento con el Despacho Boldo
Consultores?
Si además
como debiera, el presidente Alor nos informa en que administración
constitucional se originó tan significativo adeudo con el IMSS y que piensa
hacer con esos colaboradores que no le han cumplido a la ciudadanía, ya que no
los elegimos nosotros, si no él, pero nos han fallado a nosotros quienes le
pagamos, estaría abonando una de sus tantas deudas con la sociedad tan
desilusionada de su Administración y sus constantes sorpresas.
Caribe Mexicano/Julio de 2007
@watane1
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