El
Pig Brother.
Por:
Félix Justiniano Ferráez
O Jo Jo Jorge Kawaghi el verdejo diputado que
menospreciando su investidura de legislador federal, se inclina a participar en
ese ridículo jueguito de moda, en donde gente sin quehacer productivo y sin definición
de principios, toman sus defectos privados y los catafixian por virtudes
públicas y obedientes hasta la sumisión, nos muestran su pequeñez espiritual y
su ausencia absoluta de actividad cerebral.
Para
Jorge K-Kawaghi la voluntad ciudadana que lo honró con ese cargo puede esperar
hasta que él termine de jugar con sus “hermanitos”.
Los problemas de un país como el nuestro pasan
a segundo término, con varios gobernadores a punto de que se les inicie el
juicio de procedencia o desafuero, como al de Morelos Sergio Estrada Cajigal que se encuentra en mayúsculo
brete por una relación sentimental con una joven de apellido Esparragosa de
cuestionables antecedentes familiares, por problemas de corrupción y
manipulación y comercialización de coches robados, como los detectados en
Cancún y confiscado a un oficialito menor.
Con José Murat de Oaxaca y su famoso auto atentado
(de entrada la PGR
ya definió que los disparos impactados en el parabrisas delantero fueron
realizados desde adentro, que hay falsedad en declaraciones ministeriales y la
presencia de casquillos percutidos de rifles de asalto Kalashnikov pero sin
ojivas localizadas) sin soslayar el mediático caso de don Andrés Manuel López
Obrador y su obstinado complot, cuyo
efecto llegó alcanzar a un presidente municipal que haciendo una burda copia de
esa situación, ha querido emular a don AMLO sin darse cuenta que él y el jefe
de gobierno del distrito federal son personajes antípodas.
Con
la situación legal pendiente de definir de la asignación, manejo y destino de
los fondos de la fundación “Vamos México” y el fideicomiso “Transforma México”; con las muertas de Juárez cuyos familiares
exigen justicia; añada usted la grave
crisis financiera del IMSS y del ISSSTE, cuya atención no debe ser mas tiempo
postergada; con la reforma energética de la CFE inexplicablemente diferida y con unas
instalaciones cada día mas obsoletas y en contraparte el servicio mas oneroso.
Nada
de eso le preocupa al héroe televisivo,
así que la correcta distribución de los excedentes económicos por ingresos
petroleros, le vale. Las espantosas
muertes de migrantes mexicanos en territorio estadunidense y su inhumano trato
y abandono por inescrupulosos polleros, bien gracias.
La
peligrosa invasión de una miríada de facinerosos pandilleros integrantes de la Mara Salvatrucha
Todo
eso y mil cosas mas, no son suficientes para que dicho personaje se ponga a
trabajar y desquite su excelente salario; a cambio el ínclito legislador, desciende hasta encontrar su nivel entre sus
iguales, y se imposibilita para distinguir: lo importante, de lo superfluo. Lo
trascendente, de lo nimio. La vergüenza, del descaro. El orgullo, de la
vanidad, el interés colectivo, de la manipulación. La solidaridad, de la
abyección, etc.
A
ese simulacro de boxeador, lo escuchaba en el programa noticioso de Carlos
Loret de Mola, acusar de manera extraordinariamente diferida, al verdejito De
Paula de una estafa en agravio de la asamblea legislativa del D. F. por algo
mas de $ 200,000.00, expresando que había sido erogado del ERARIO PÚBLICO (sic)
ya que esa virtud de diputado, ha de conocer también erarios privados, en su
espléndido conocimiento del lenguaje y de la terminología legislativa.
Además
de apuntarse la magistral respuesta a De
Paula, quien a su vez lo acusó, de que
en viajes legislativos al exterior, se paga habitaciones de hasta mil euros la
noche, “sólo que él lo paga de viáticos o de su sueldo;” ¿de que erario estaría
pensando su cerebrito que son cubiertos sus viáticos, sueldos y demás gastos?
Subordinado
hasta la genuflexión, fue uno de los apologistas del otro Jo Jo Jorge pero este
González Martínez, ambos lacras legislativas y rémoras del erario federal.
Se
acuerda usted de aquel juicio de procedencia que se intentó realizar a Roberto
Madrazo, cuando le fueron descubiertos sus gastos de campaña y puestos a
disposición de la autoridad competente por AMLO
en unas cajas cuyos contenidos acreditaban que dicha campañita había
resultado más costosa que la del propio presidente de los Estados Unidos.
(William J. Clinton)
Pues
bien ese juicio jamás procedió, en virtud que los escasísimos votos verdes que
hacían la diferencia en el Congreso de la Unión para lograrlo, no fueron capaces de
rechazar las componendas, ni los cañonazos del pri-gobierno.
Por
cierto en que quedaron las indagaciones de aquel secuestro denunciado por
Roberto Madrazo, siendo Procurador General de la República José
Hoy
ya sabemos que el senador Diego Fernández de Ceballos, además de correligionario, es abogado
defensor de Sergio Estrada Cajigal, para
ambos es legal, aún cuando no sea ético. No nos extrañe si el piloso senador
hizo lo propio con Fernando García Zalvidea, cuando otro ínclito panista como
Antonio Lozano Gracia, le advertía de “montañas de dinero” para resolver aquel
cuestionado CASO CANCUN; de repente desde lo oscurito aparezca en la defensa
del no menos conspicuo alcalde de Cancún. Al tiempo. Mientras tanto le sugiero que se cambie al
“Animal Planet” ahí por lo menos
aprendemos de esos animalitos.
Caribe
Mexicano 2003
@watane1
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