Juez
y parte.
Por
Félix Justiniano Ferráez
Los
nombramientos del nuevo Concejo Ciudadano empiezan a demostrar una falta de
tino que ofende el buen juicio y la memoria de la sociedad de Cancún; de manera
insólita el ex Director de Egresos del cuestionadísimo Tesorero Adrián López
Farfán, el otro contador, Felipe Cohuo Dzul, fue colocado ni más ni menos que
como Contralor Municipal.
A Doña
Marisol Ávila, su falta de preparación universitaria y su inexperiencia en el
servicio público la indujo a sacar el cobre y permite que ese Suigéneris
personaje que es Felipe Cohuo, se convierta ilegalmente en juez y parte de todo
el cochinero financiero provocado por el “Chacho” y avalado con las firmas de
Adrián López y el propio Cohuo Dzul.
A la Señora
Presidenta Concejera se le olvidó también, no quiso ver, o simplemente le
valió, que el contador Felipe Cohuo en su calidad de Director de Egresos,
firmara los cheques sin fondos que fueron entregados entre otros al: Sindicato
del Ayuntamiento, Proveedores y otros prestadores de servicios. Así mismo doña Marisol hace caso omiso, o
voltea para otro lado cuando los hechos evidentes y la penosa realidad de los
mismos, le recuerdan que absolutamente todas las adquisiciones y suministros
ilegalmente no licitadas, ni concursadas, pretendieron darle desde la Tesorería
su respectivas actas de nacimiento, al avalarlas firmando los cheques el
Tesorero y el Director de Egresos para pagar todas esas ilegalidades.
Ellos no
otros, llevan el peso de la responsabilidad y las consecuencias de haber
firmado las erogaciones para financiar los dispendios del Alcalde, traducidos
en todos aquellos excesos puntualmente denunciados por la prensa, radio y
televisión locales y nacionales.
El origen
jamás aclarado de los famosos 125 millones de pesos ingresaron necesariamente a
la tesorería y se fugaron por ese
boquete denominado Dirección de Egresos en las actividades que ahora el
flamante Contralor Municipal deberá de investigar y sancionar de manera atingente,
objetiva y profesional y curiosamente le tendrá que exigir a su antiguo jefe el
ex tesorero que justifique los ingresos no aclarados ante la sociedad vía el
Cabildo y que de común acuerdo con el propio Cohuo desviaron para los abusivos
afanes políticos del ex Edil.
Felipe
Cohuo, no otro Señora Presidenta, será el que investigue y sancione la falta de
licitaciones y concursos que sumaron en su conjunto una importante cifra de
millones de pesos (recolectores de basura, patrullas, vehículos
administrativos, maquinaria de obra y servicios públicos, equipo de
radiocomunicación, etc.), y que fueron precisamente pagadas por el hoy
Contralor, que muy mañosamente acepto ese cargo.
¿Cómo
justificarán el intercambio de partidas presupuestales jamás autorizadas por el
cabildo y que les permitió seguir pagando entre otras cosas “Aviadores, rentas
de oficinas, adquisiciones suntuosas, viajes de promoción y propaganda, del hoy
ex alcalde así como los demás inútiles gastos mañosamente no presupuestados en
el presupuesto original? ¿Se le ha
ocurrido pensar Señora Presidenta a cargo de quien estuvo la firma de cada uno
de esos cheques? En efecto, a cargo de
la misma persona que usted ha designado para investigarlos y sancionarlos. Ya que muy puntualmente el “Chacho” en tono
premonitorio nos advirtió: “Vamos a Limpiar Cancún” y como ya lo habrá
comprobado usted, lo hizo justamente con la escoba de la Dirección de Egresos
en manos de Felipe Cohuo.
Con
anterioridad ese taimado personaje investido actualmente de Contralor Municipal
laboró en una dirección de la propia Contraloría que hoy encabeza y conocía
perfectamente todos los procedimientos legales que se violaban
consuetudinariamente en la administración “chachista” y muy convenientemente
hacía mutis para seguir pegado a la ubre que lo mantenía como a tantos otros
corruptos ex funcionarios.
Como Oficial
Mayor de la administración pasada supe del fingido puritanismo del señor Cohuo
para obstaculizar cuantas licitaciones realizamos en la administración de la
Profesora Achach, donde también por cierto la señora. Reyna Arceo como
Contralora Municipal argumentaba y esgrimía mil instrucciones y condiciones
para firmar las actas del Comité de Compras que alguna vez presidí.
Es
paradójico ver hoy a esos dos personajes como se desentienden de los dos años
tres meses que duró el latrocinio de Adrián López y Alberto Peniche a los
cuales les sirvieron sumisa y convenencieramente; su lealtad de papel hoy da un
giro de 180 grados y está puesta al
servicio de sus nuevos amos; la integridad, la ética y la moral de estos
señores, brilla por su ausencia como lo hizo en el pasado y el Concejo ya mandó
un aviso de cómo se manejaran las cosas estos nueve meses restantes.
Por último
el sentido común que es precisamente el menos común de los sentidos, debió
indicarle que para ratificar o promover a un ex funcionario, Señora presidenta,
debió usted haber esperado el resultado independiente de las investigaciones a
cargo del Órgano Superior de Fiscalización, antes de asumir las injustificadas
decisiones que tomó.
Pobre
Cancún, hasta cuando seguirá siendo botín de unos cuantos impreparados.
Caribe Mexicano/2004
@watane1
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