miércoles, 21 de octubre de 2020

Confinados.

 


Confinados.

(En el año de la pandemia)

 

Vida dime que es vivir

Atado a un presentimiento

Sujeto a un experimento

Solo y sin poder salir.

Dime como es compartir

La vida pero sin miedo

Sin penas y sin remedo

Libre como el sol y el aire

Vivir sin ningún desaire

De la tormenta que hospedo.

 

Dime donde está la ciencia

Por qué razón o motivo

Se muere lo que está vivo

Se amedrenta la existencia.

Por qué se apaga la esencia

Como si fuera la brisa

Desaparece la risa

Y se troca por el llanto

Vivimos con desencanto

La angustia como divisa.

 

La incertidumbre se instala

Estableciendo distancias

Va eliminando fragancias

Y la paciencia acorrala.

Se incrementa la alcabala

Para vivir sin contacto

Es solo recuerdo el tacto

Se vive en filantropía

Vivir es una osadía

Si el mundo está estupefacto.

 

Al reloj se le ha extraviado

Las horas y los segundos

El mismo tiempo circundo

Parece el tiempo sedado.

Vivir, vivir de prestado

Ese tiempo que se aleja

Vivir es la moraleja

Cuando tienes sin tener

Morir para renacer

En este tiempo que aqueja.

 

La luna eterno botón

Fijado en el firmamento

Motor de los sentimientos

Y nido de inspiración.

Me mueve a la reflexión

Si la certeza no alcanza

La vida es una mudanza

Entre principio y final

Triunfo del bien sobre el mal

Donde yace la esperanza.

 

F. Justiniano. F.

Caribe mexicano/2020


Comandante Inurreta

 


Comandante Inurreta.

 

Rafael Inurreta Navarro

(In memoriam)

 

Adonde fuiste Rafael

Que nos dejaste tu ausencia

Eres recuerdo y esencia

Y un barco sin timonel.

Fuiste un corazón de miel

Durante toda tu vida

Pero siento la mordida

Fatal en mi anatomía

Rafa, del más triste día

El día de tu partida.

 

Ya eres parte del ocaso

De la brisa mañanera

Un rumor entre palmeras

Nueva huella de tu paso.

Te abrazo Rafa, te abrazo

Y no quisiera soltarte

Si el corazón se me parte

Porque se que ya no estás

Todo es silencio nomás

Que la nostalgia reparte.

 

En el mundo paralelo

Donde brilla tu sonrisa

Eres trino, rugido, brisa

Honor, ejemplo y anhelo.

Mientras pasa el desconsuelo

Y esta suerte de ruleta

Juego a que soy poeta

Para rendirte tributo

Con un respeto absoluto

Mi comandante Inurreta.

 

En tus diversas facetas

De abuelo, padre o hermano

Nos dejas el sello humano

De todos los Inurretas.

Seres de almas inquietas

Igual que tu descendencia

Sempiterna congruencia

Entre el decir y el hacer

En tu elocuente quehacer

Que nos dejas como herencia.

 

Quiero pensar que quizás

Mi querido bisabuelo

Que puede haber un consuelo

Si esto es solo un compás.

Debo añadir, además

Con el duelo por delante

Tu estatura de gigante

Nos eleva la mirada

Para decir camarada

¡Hasta siempre comandante!

 

F. Justiniano. F.

Caribe Mexicano

Julio de 2020.

 

 


Chetumal en su 122 aniversario

 


Chetumal.

 

(Oda de gratitud en su 122 aniversario)

 

Te circunda la bahía

Adornada de manglares

Brisa de allende lugares

Te rinden su pleitesía.

Centenaria y bravía

Chetumal bendita seas

Influencias europeas

Prevalecen en tus calles

Como elegantes detalles

Que exhibes como preseas.

 

Reciedumbre de un linaje

Bravo, rebelde, valiente

Sangre maya omnipresente

En el actual mestizaje.

Emblemático paisaje

Embellece tu bahía

Pinos en infantería

Cocoteros, uva de mar

Firmes en tu bulevar

Y el faro como vigía.

 

Señora entre las señoras

Eres madre caribeña

De gente buena, risueña

De jaguares y de auroras.

Cuna de aves canoras

Del cedro, del ciricote

Caoba, chicozapote

Refugio del manatí

Del tucán, del colibrí

De la abeja y del jicote

 

Eres la hermana mayor

De tus islas circundantes

Le brindaste navegantes

Paridos con tu dolor.

Por tu mar en su fragor

Que te llama con sus olas

Gaviotas con sus cabriolas

Te cantan en mar abierto

Y el eco de su concierto

Se escucha en tus caracolas.

 

México empieza contigo

Para adentrarse en tu selva

Verde clamor que devuelva

La esperanza del abrigo.

Vencedora del castigo

De pandemias y ciclones

Tus hijos férreos varones

Te sacaron adelante

Con un coraje gigante

Porque así tú lo dispones.

 

Chetumal de mis amores

De mi emoción de poeta

Sueños que en una maleta

Los traje con mis sudores.

Murmullo entre tus rumores

Llegué una noche oscura

Para iniciar mi aventura

 Sin ninguna pretensión

Y supe de tu corazón

Dulce de caña madura.

 

Madre también de mis hijos

Y todos mis descendientes

Tus soldados permanentes

De sentimientos prolijos.

Resueltos los acertijos

Llenos de ti, de tu esencia

Te expreso en mi reverencia

¡Chetumal prez y cantera

Somos de buena madera

E indomable resistencia.!

 

F. Justiniano. F.

Caribe mexicano/v/2020


Amor y apariencias.

 


Amor y apariencias. 

 

De vez en cuando suspira

Atrapada en el pasado

Él era un hombre casado

Sosteniendo una mentira.

Nuevo relevo la inspira

Y esquiva la diferencia

Formaliza la apariencia

Amor de redes sociales

De vidas artificiales

Sin visión, ni inteligencia.

 

Aferrada a su quimera

Se confronta con el tiempo

Espejismo o pasatiempo

Mientras dura la chequera.

Lo sabe y se desespera

Viendo pasar a sus días

Se incrementan sus manías

Sus dudas, su mal humor

Y frente al espejo traidor

Descubre canas y estrías.

 

Una decepción latente

La selección del relevo

Un limitado mancebo

Tan pueril como insolvente.

En este nuevo presente

La vida es una perversa

Le muestra su faz adversa

Con el tiempo indetenible

Si para ella es horrible

Para él marcha en reversa.

 

En esta nueva relación

Con fecha de vencimiento

Se suplanta el pensamiento

Con minutos de pasión

Decidir sin reflexión

Es jugar a la baraja

Y al filo de la navaja

Todo o nada es la apuesta

Y también estar dispuesta

A quedarse con migajas

 

FJ/Caribe Mexicano

Noviembre/2019

 


el profeta del infortunio.

 


El profeta del infortunio.

 

Saturado de mentiras

En su teatro del absurdo

Va contando a sus palurdos

De sus rifas y sus giras.

Sobre cadalsos y piras

Montados en amarguras

Sus venganzas y locuras

Las soporta con sus datos

Treinta millones de suatos

Aplauden sus desmesuras.

 

Proclive a la coprolalia

En temas de seguridad

Sucumbe a la realidad

E incrementa su dislalia.

 Gobierno con acefalia

De austeridad disfrazado

Derrochador obstinado

Sobre vidas de inocentes

Ante el dolor inclemente

Responsabiliza al pasado.

 

El único rey desnudo

Del plano internacional

Candidato proverbial

Que cuando quiso, no pudo.

Ni al lábaro, ni al escudo

Símbolos de identidad

Saluda por casualidad

Prepotente y ofensivo

Presidente primitivo

Montado en su necedad.

 

En el propio Bellas Artes

Celebra la pedofilia

La promueve, la auxilia

Con sus propios hierofantes.

Va escombrando los baluartes

Con postura autoritaria

Lo vemos en forma diaria

Cancelando inversiones

Regodeando sus traiciones

Con patrañas y plegarias.

 

Se empeña en Santa Lucía

El tren maya y dos bocas

Sus decisiones barrocas

Alimentan  su jauría.

Con la cabeza vacía

Desprecia el conocimiento

La experiencia, el talento

Presidente rebasado

Torpe, necio, obstinado

Como si fuese un jumento.

 

Hoy se vive en el planeta

Legítima preocupación

Pues hay en cada rincón

Un virus que nos inquieta.

Pero hay quien se parapeta

Detrás de la estupidez

El vernáculo soez

Cobrando de presidente

Un iracundo demente

Sin elemental lucidez.


El necio.

 


El necio.

 

Un político neandertal

Atípico, primitivo

Torpe, necio, abusivo

Obstinadamente asnal.

Cual pandemia adicional

Sus aires de iluminado

Tienen al pueblo postrado

En un ambiente salobre

Está empobreciendo al pobre

Con dinero malgastado.

 

Como un Midas que al revés

Destruye todo a su paso

Este perfecto pelmazo

Alardea su estupidez.

Enarbola la honradez

Pero florece el dispendio

El narco con su estipendio

Rescatando al pueblo sabio

Se ha perdido el astrolabio

Y solo empieza el incendio.

 

El único presidente

Que del virus se burlaba

Desdeñándolo invitaba

A que saliera su gente.

El virus omnipresente

Se mueve con desparpajo

Está cobrando a destajo

Con vidas en la factura

Y el pueblo por desventura

Con muertos y sin trabajo.

 

Sus funcionarios chiquitos

Se callaron como momias

Padecen todos anomias

No nos gustan sus moditos.

Son lacayos expeditos

Su gabinete de abyectos

Serviles sus predilectos

De culto a la hipocresía

Parece  entomología

Si gobierna con insectos.

 

Expresa: “no soy florero”

“Ya la tenemos domada”

Que se la metan doblada

Al despreciable embustero.

Salta presta del tintero

Al que parece maceta

Una infalible receta

De la mafia del poder

Para que no vuelva a joder

Que se la metan completa.

 

FJ/2020


El cobarde matoncito.

 


El cobarde matoncito.

 

No por mucho madrugar

Amanece más temprano

Como le pasa a un anciano

De pensamiento secular.

Por su acción testicular

Por su cerebro chiquito

El ínfimo señorito

Ya tiene nuevo cartel

Le dicen Andrés Manuel

“El cobarde matoncito”

 

Si discrepas eres Fifí

O también conservador

Y justifica a embajador

Cleptómano de pedigrí.

El mañanero frenesí

Del cabeza de chorlito

Le ha otorgado un sambenito

Que con nada se le alivia

Pues le gritan de Bolivia

“El cobarde matoncito”.

 

Asilar a Evo Morales

No fue ocurrencia barata

Se fue el tiro a la culata

A los siameses carnales.

Son pifias monumentales

Carreras de caballito

Por la cual le dicen pito

Al mexicano mandamás

Pero le disgusta más

“El cobarde matoncito”.

 


la media docena

 


Media docena.

 

Qué pena, por Dios, que pena

La ignominia, el servilismo

La abyección, el patetismo

Ministros de pena ajena.

Ridícula media docena

Un tribunal como alfombra

Por ello el país le nombra

Ni suprema, ni justicia

Si es muladar e inmundicia

Donde el derecho se escombra.

 

 Un país decepcionado

Una nación ofendida

Una lucha fratricida

Repugnancia por lo obrado.

Participio mutilado

Significando al demente

Un sujeto deprimente

Que convirtió en albañal

Al máximo tribunal

Y a su homólogo indecente.

 

Fue jueves uno de octubre

Del año de la pandemia

Un hito en la academia

De la más jugosa ubre.

Media docena insalubre

Aprobando una consulta

Ilegal, absurda, estulta

Que sabe a galimatías

Al servicio de un mesías

Que un pelafustán resulta.

 

La tremendísima corte

La que preside Arturito

Con su latente prurito

Parece feliz consorte.

Le otorgaron pasaporte

La media docena enana

Al loro que en la mañana

Presume de su estulticia

Y a la corte de justicia

La convirtió en cortesana.

 

 

 

                                                                                                                      Caribe Mexicano

Octubre de 2020

F.J.